Diccionario cinematográfico (210)

restlessI

Funerales: … así el primero que me viene a la cabeza es el de Cuatro bodas y un funeral. Y es en ese funeral donde se recita un maravilloso poema W. H. Auden. Ya solo por esta escena merece la pena ver más de una vez este ya clásico de la comedia romántica.

Otro funeral en el cual no puedes evitar una emoción catártica es en Imitación a la vida. Melodrama puro y duro donde asistimos al funeral de una mujer humilde (el personaje de Juanita Moore) que alcanza sólo pleno protagonismo el día de su muerte. El momento gospel de Mahalia Jackson en la iglesia alcanza un alto grado emocional.

Imposible no sobrecogerse con el funeral de Denys Finch Hatton en Memorias de África… y esa Karen Blixen que trata de tirar arena…, su mano tiembla y no puede.

Por otro lado están esas películas de reencuentro o reuniones de amigos en el que uno fallece. Y el entierro sirve de punto de encuentro entre recuerdos y tristezas o de momento de catarsis final. Así nos encontramos en los funerales de Reencuentro de Lawrence Kasdan o en el de Pequeñas mentiras sin importancia de Gillaume Canet.

En algunos funerales, en los momentos previos cuando se vela al muerto, ocurren milagros o fenómenos extraños como demostraron Theodor Dreyer con La palabra, Carlos Reygadas con La luz silenciosa y Manoel de Oliveira en El extraño caso de Angélica.

Familias rotas por la muerte… y funerales que son puro grito. Como el de una madre que no entiende la pérdida de su hija. Que le parece lo más injusto. Así tenemos monólogo escalofriante después del funeral, delante de la tumba, de Sally Field en Magnolias de acero. O en otros casos el consuelo es recordar al ser amado a través de sus momentos felices en fotografías y con anécdotas felices como hace el personaje de Liam Neeson en el funeral de su esposa en Love Actually.

Como digo la muerte de un ser querido puede hacer pedazos una familia y que cada uno viva de manera muy distinta la ausencia. Que cada uno sufra su dolor como puede… Así Nanni Moretti nos muestra un entierro durísimo (y sus consecuencias) en La habitación del hijo.

También en los funerales pueden empezar extrañas historias de amor y amistad. Sus protagonistas tienen afición por acudir a funerales de desconocidos… Se encuentran y unen sus destinos así como sus gustos por asistir a estos actos. Acordémonos de Harold y Maude de Hal Ashby o de Restless de Gus van Sant.

… Hay personas que trabajan en una funeraria y la muerte es algo cotidiano en sus vidas. Estos trabajadores también han sido protagonistas de películas (incluso series). A principios de los años noventa conocimos a un director de funeraria con cara de Dan Aykroyd que tenía una hija casi en la adolescencia obsesionada con la muerte (no podía ser de otra manera)… en Mi chica. En esa misma película una experta maquilladora  (Jamie Lee Curtis) sin trabajo busca empleo… y en la funeraria lo encuentra. Encuentra empleo y el amor de Dan. También un director japonés, Yojiro Takita, contó la historia de un violoncelista en paro que encuentra trabajo en una funeraria limpiando los cuerpos y preparando a los fallecidos. Su vida dará un vuelco… Hablo de Despedidas.

Y aunque parezca imposible un funeral también genera buena comedia… Así una comedia británica gira en torno a un entierro delirante. Y la risa está servida en Un funeral de muerte de Frank Oz. O Shirley McLaine protagoniza al principio de Ella y sus maridos un funeral absurdo… donde los hombres que bajan un ataúd rosa por unas escaleras pierden el equilibrio y…

Otros permiten la fantasía… como la despedida deseada y el funeral alternativo de un cuentacuentos con el rostro Albert Finney en Big Fish.

Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons

18 comentarios en “Diccionario cinematográfico (210)

  1. ¿Te he dicho alguna vez que en «Big Fish» me plagiaron el nacimiento…? Hala, otra historieta de abuelo Cebolleta…

    ¿Hablamos de funerales o de entierros? Porque los entierros también tienen lo suyo. En el cine americano suelen coincidir, sobre todo en el Oeste («Los cuatro hijos de Katie Elder»), aunque no necesariamente («La condesa descalza»). O, más propiamente, «El funeral», de Abel Ferrara. Y luego están esas ceremonias domésticas, en las que suele haber un montón de comida en torno a la foto del finado, tipo «Mystic River», «Gran Torino», y tantas y tantas en las que suele aprovecharse para meter un contenido a tope dramático, de gran intensidad…

    ¿Y en el cine español, qué?: «Tres días con la familia», «Vorvik», la muerte de Chanquete…

    Ya veo que apuntas hacia la Semana Santa…

    Besos

  2. Pero, bueno, ¿saliste resbalando por el suelo y te pegaste un gran viaje de recién nacido…? ¡Pegando ya esos sustos a tu pobre familia!

    En el rito del funeral meto como habrás visto, velatorio, misa, entierro, ceremonia posterior… Es un tema tremendamente cinematográfico como demuestras con tus propuestas.

    Ese entierro bajo la lluvia de Maria Vargas, toda la ceremonia y ese velatorio tan especial en El hombre que mató a Liberty Valance.

    ¿Te puedes creer que aún no he visto EL FUNERAL de Ferrara?

    Besos
    Hildy

  3. Esta clase de artículos me encantan,amiga Hildy.Hoy nos introduces en «Funerales de cine».Genial. Vamos allá. Me conmueve ese Luisito (José Luis López Vázquez)que todavía no ha crecido del todo porque no le dejaron en La prima Angélica. Ve la exhumación de los huesos de su madre en el cementerio de Montjüic de Barcelona para llevárselos y volverlos a enterrar en Segovia. Me gusta El entierro prematuro de Poe,pero no sé si se ha hecho una película de este relato tan espeluznante (ya sé este no vale porque no es una peli).Me gusta ese funeral tan extraño que sale en la película de Buñuel Belle de Jour donde vemos un féretro muy hermoso en aquel caserón tan grande y con lluvia en las ventanas.Por cierto,¿por qué llueve siempre en los entierros cinematográficos? ¿Para darle un matiz más tenebroso a la muerte? Creo que un entierro en un día soleado es más macabro,ya sabes,un día hermoso donde cantan los pajaritos y la muerte no adquiere importancia en este perro mundo.Pero sigamos. Como dice mi buen amigo Alfredo,me gusta la cremación de Darth Vader,una historia tan futurista y acaba quemándose sobre una pira como el Senescal de Gondor en El señor de los Anillos. Me gustan esos entierros en donde el muerto todavía no quiere claudicar como el gran Christopher Lee en su serie de películas de Drácula.¿Vale también las visitas a los cementerios? Porque tiene miga el asunto.El que más me gusta de todos es en la película Nebraska cuando aquella gárrula se levanta la falda delante de la tumba de su marido y sobre todo aquella visita al cementerio de los dos hermanos que van a ver la tumba de un tío. A lo lejos,desenfocado,vemos una figura que camina hacia ellos tambaleante. El público de aquella época no se esperaba lo que era.Hoy sigue dando miedo.Es otro muerto que no le da la gana quedarse dentro de una caja a oscuras y unos cuántos metros bajo tierra,ah,¡con esa humedad!

    Me quedaría más tiempo aquí escribiéndote sobre el asunto,amiga.

    Besos con campanas a lo lejos a lo espagueti western.

  4. ¡Los multiples entierros de Drácula y su hogar que es un ataúd! Madre mía, madre mía. Ay, querido Francisco, y otro entierro muy peculiar ocurrer en una película reciente La espuma de los días de Michel Gondry…, una adaptación de la novela de Vian.

    Sí, entierros y lluvia. También se da la ceremonia de un velatorio eterno. El que vive la Blancanieves de Pablo Berger.

    Las visitas a las tumbas… dan para otra entrada especial. La que señalas de Nebraska de Payne es perfecta para empezar…

    Respecto a Poe y el espeluznante relato de EL ENTIERRO PREMATURO existe una película de Roger Corman que protagoniza Ray Milland que se titula LA OBSESIÓN sobre ese relato. ¡Tremenda!

    Besos
    Hildy

  5. Estaba apunto de decir delicioso…pero claro está el tema es el que es…los hay de muchos tipos, pero no puedo con el de las pequeñas mentiras sin importancia…es superior a mi.
    Tengo que volver a ver ella y sus maridos, me has recordado una película curiosa…
    Entre la risa y el llanto está el de Elizabethtown.
    Los hay que ocupan el tema de toda una película como Jardines de piedra…pero no puedo olvidar a Paul Newman como ese borracho abogado que va a entregar su tarjeta a funerales varios en Veredicto final.
    La imagen que has puesto es de Restless ¿no? Megustaría saber tu opinión sobre ella. Yo no la he visto pero la tengo a tiro de kiosko a 2,95 euros. Y no la he cogido por que no se que tal está. Si me dices que merece la pena no se escapa. Un abrazo

  6. Mi querido Victor, a más de uno y de una les pone de los nervios pequeñas mentiras sin importancia… tal es así que me estoy planteando volver a verla… porque algo se me escapó. Quizá la viera en una tarde con cierta tontuna. A mí todos me dieron mucha, mucha pena… Me pareció una película muy triste y un grupo de amigos muy perdido…

    Recuerdo al abogado de Veredicto con ojos de Paul Newman. También es tremenda otra de Ricardo Darín, Carancho, de un abogado relacionado con tremendos accidentes de coches, que anda por los hospitales y los funerales. Y siguiendo con Trapero, hay funerales tristes, tristes, tristes en Elefante Blanco.

    Yo siento un amor especial por Gus Van Sant. Restless pasó como un suspiro y creo que no se merecía tan poca atención. A mí me pareció un cuento especial de amor y muerte. Y creo que esa es la clave, es un cuento a mi parecer muy sensible. Te dejó el link de lo que escribí en su momento (http://hildyjohnson.es/?p=2187). Ya me dirás qué te parece.

    Besos
    Hildy

  7. Pues, efectivamente: del útero al suelo (lo del deslizamiento es una licencia poética timburtoniana…) y clavícula rota. Minuto uno de nacer. Jopé.
    Algunos nacen con estrella y otros (el mendas) estrellados…
    Besos

  8. ¡Ay, mi querido Alfredo, menudo susto tuvo que pegarse todo el mundo!¡Tan bebé, en el suelo y con una clavícula rota!… Se me parte el alma…

    … Si es que tú ya querías ir corriendo a la sala de cine… y escalar los 39 escalones. Si es que ya te querías poner a mirar, investigar y escribir… Y claro, las prisas nunca son buenas.

    Besos
    Hildy

  9. En los años sesenta, en suelo cubano, tuvieron lugar dos funerales o cortejos fúnebres que merecen figurar en este recopilatorio: uno de ellos lo filmó Gutiérrez Alea de manera harto sarcástica en «Muerte de un burócrata» y el otro lo presentó un ruso enamorado de La Habana (Kalatozov) a través de un plano secuencia absolutamente inverosímil en «Soy Cuba».
    Un abrazo, Hildy.

  10. … Geniales y muy interesantes tus aportaciones, querido Antonio, de dos películas que tengo en mi baúl de películas pendientes. Y es que el funeral (el enterramiento y el ritual… sea de la cultura que sea, sea de la creencia que sea) es un acto siempre presente en la vida de todo hombre. Y el único en el que será protagonista inconsciente.

    Me acaba de venir a la cabeza un funeral triste y solitario protagonizado por un sin hogar con problemas de salud mental. A su entierro (en una fosa común) solo asistirá otro sin hogar. Hablo de ÁNGELES SIN CIELO de Tim Hunter con Matt Dillon y Danny Glover.

    Y me voy ahora a Japón con Akira Kurosawa para recordar un velatorio especial, el del protagonista de VIVIR, que ocupa casi toda la segunda parte de la película…

    Beso
    Hildy

  11. Muy buena esta recopilación y brillas cuando haces estos artículos digamos que amplios sobre algún tema de cine.

    Me viene a la cabeza una película de serie b pero bastante elegante. La obsesión de la factoria Corman. Bajo presupuesto y la cochambre acostumbrada, pero con esa clase y estilo que solo el sabia dar a sus obras. Bastante interesante sobre un relato de Poe

    Funeral en berlin, un trhiller mas que interesante estéticamente sesentero y donde Caine brilla. Y tambien aunque no sea precisamente ese el eje de la película. Los cuatro funerales de Melquiades Estrada, una de las mejores películas del oeste o de acción o como se quiera catalogar de los últimos años. Que desgraciadamente paso totalmente desapercibida. Cuidate

  12. Querido Plared, sí, qué encanto más especial tiene LA OBSESIÓN. Ray Milland está inquietante y muestra de manera obsesiva (nunca mejor dicho) ese miedo que el ser humano tiene, el miedo a ser enterrado vivo. Y es uno de los miedos más íntimos del hombre…

    Te confesaré que no he visto ni Funeral en Berlín ni Los cuatro funerales de Melquiades Estrada y sin embargo ambas me apetecen bastante, sobre todo la segunda.

    Recuerdo ese tremendo episodio de Alfred Hitchcock presenta…, de esa presa que para huir simula su muerte y la entierran viva. Antes ella ha quedado con el enterrador para que cuando llegue el momento la saque da ahí y… Uno de los episodios que me produjo más pánico.

    Besos
    Hildy

  13. De «Restless» es la foto, ¿verdad? Un catálogo estupendo el que ofreces. Voy a aportar una reciente, «Agosto» de John Wells, donde la cena post-funeral es lo mejor de la película.
    Saludos.

  14. … Sí, tienes toda la razón es una escena buenísima, querido Licantropunk. Ya sabes que a mí Agosto y el texto teatral me gustó bastante… pero esa escena, la de esa cena después del funeral, es una pasada…

    ¡Sí, la fotografía es de la película de Gus van Sant!

    Besos
    Hildy

  15. ANGELES SIN CIELO se dio en Chile como EL SANTO DE FORT WASHINGTON…es una película conmovedora que al parecer tenía como objetivo criticar la economía de Reagan pero resultó una historia llena de valores humanos.El cementerio para indigentes se llamaba Potter’s Field que se puede traducir como «campo del alfarero» y si no me equivoco así se llamaba el terreno donde se instalaba la tumba de Jesús

  16. Querido Iván, Ángeles sin cielo es de esas películas que te dejan sin respiración… son bellas, pero tristes y duras. Y la escena del entierro en la fosa común es demoledora.

    Beso
    Hildy

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.